Rebuscando mi colección de cómics encontré esta joyita, en 3 números, de la mano del estupendo Jean Van Hamme al guión (y algún día tendré que dedicarle toda una entrada solo a este autor). El Autor, el mismo de Thorgal, valga decirlo, nos explica en sus palabras la premisa de la obra:
“Cuando una norma es impuesta para asegurar la teórica felicidad de la mayoría, ¿Qué ocurre con aquellos que, voluntariamente o no, se apartan de ella?”
“Cuando una norma es impuesta para asegurar la teórica felicidad de la mayoría, ¿Qué ocurre con aquellos que, voluntariamente o no, se apartan de ella?”
Asi pues, su propósito es hablar, por medio de unos relatos que podrían no ser tan ficticios, del peligro que representa para la libertad individual, los excesos de “buena voluntad” de un Estado del que se esperan demasiadas ventajas. De ahí el título de la serie.
El primero de los relatos, de tinte Orwelliano, sitúa en un contexto de crisis económica y paro una empresa que prohíbe a sus empleados, demasiado felices por cobrar un sueldo, que se interesen por la razón de ser del trabajo que se les encomienda.
"Cinco años de paro son demasiado"
Los otros cinco relatos tocan temas tan cotidianos pero abstraídos a un nivel de totalitarismo y censura absurda: La Seguridad Social obligatoria y las terribles consecuencias de no estar afiliado; Las vacaciones “para todos”, forzosas, y a sitios que a veces parecen prisiones mas que campos de recreo; El registro de los ciudadanos, donde un hombre sin su carnet universal no es persona; El control de la natalidad, donde los niños nacidos ilegalmente son obligados a desaparecer en las catacumbas; Las subvenciones para los artistas, donde el no ceñirse a parámetros de censura establecidos hace que se pierda sueldo, libertad, y dignidad por ejercer la escritura ilegal.
Las 6 historias aparentemente independientes tienen conexión en un tercer volumen en donde se “explica” el tejemaneje de dicho régimen, y se alimentan las ansias de libertad revolucionaria del lector, para darnos cuenta mas adelante que incluso dicha revolución, sus causas y detonantes, ya han sido planeadas de antemano para imponer otro régimen, entrando así en un desesperanzador circulo vicioso de nunca acabar.
Originalmente ideado como un guión televisivo a inicios de los 80’s, iniciativa que fracasó, su autor decidió reconvertirlo en una historieta, secundado en la ilustración por Griffo (Werner Goelen), artista mas enfocado hacia la publicidad, pero con un dibujo, en palabras de Van Hamme “auténtico, rudo, que va directamente a las tripas, aparentemente tallado con un hacha. Luego, en una segunda lectura, se puede apreciar, en los miles de detalles con los que configura sus personajes y en la intensidad del ambiente, un manifiesto mundo compacto de seres vivos.”
Es así como estos dos geniales artistas nos ofrecen una obra maestra imprescindible para tratar de asimilar el mundo en que vivimos y las consecuencias nefastas que podrían derivar de permitir que el concepto de globalización y la despersonalización que trae consigo, tan de moda en esta época, pero ya tratado con la crudeza con que lo hizo esta historia hace mas de 20 años, se impongan sin control sobre las libertades individuales del ser humano.
A quien no le guste el cómic o la historieta, la forma de narración y su puesta en escena la hacen muy “televisiva” y perfectamente digerible y disfrutable para cualquier lector profano.
Adelante, que embarcarse en esta lectura no tiene pierde.
Aqui el link obligado, la excelente reseña que hace Rafael Marin sobre la obra:
http://www.bibliopolis.org/umbrales/umbr0019.htm
Muy interesante. Desde que vi en 1984 la película 1984(recuerdo que se estrenó ese año precisamente) era asignatura pendiente leer la novela. Años más tarde la leí y me gusto más que la película. Aunque hoy día, con la globalización y en plena era de internet, parece más lejana la amenaza de la alineación por un régimen totalitario, nunca está de más recordar de vez en cuando cosas que pasaron ,como quien dice, anteayer, o imaginar por medio de la ficción algo que podría pasar mañana.
ResponderBorrarEstando Van Hamme al guión la calidad está garantizada.Esta obra no se ha editado en español, ¿no?
Yo la leí y la tengo en español. En la 2° foto (perdon por la calidad, que deja que desear)de esta reseña se puede observar los 3 tomos editados en la colección "trazo libre" de Grijalbo-dargaud hace unos 15 años.
ResponderBorrarY por supusto, el libro 1984 es una obra inconmesurable del siglo XX, gestora e isnpiradora de tantas "distopias", que no utopias de la cultura popular, sea el Cine, la literatura, la historieta, o el execrable reality "Big Brother" y secuelas.
Excelente. Tenés que volver a prestármela.
ResponderBorrarCon este comic me pasa algo curioso, he conseguido el primer tomo y el tercero y por lo tanto no puedo completar la lectura. Por lo que llevo leido me parece de alta calidad como casi todo lo que escribe el gran Van Hamme.
ResponderBorrarAcabo de descubrir este blog y por lo que he visto me pasaré a menudo... a mí me encanta Thorgal también.
Enhorabuena.
Tiene una pinta muy interesante. ¡No conocía esta serie!... y eso que es de Van Hamme.
ResponderBorrarGracias, Enrique, no me había fijado.
ResponderBorrarPues la verdad ni lo he leído, ni había oído hablar de él. Justo acabo de terminar con el que estaba, Camelot 3000 (así que creo que me voy a hacer con ello), porque la verdad tiene mucha pinta.
ResponderBorrarP.D. ¡Bien, bien! Ya puedo firmar!
Te comento en cuanto me lo lea, lo que me ha parecido.
Hola.
ResponderBorrarNo conocía este blog pero sus contenidos me parecen estupendos e interesantes.
Vendré más por aca.
De estos tres albumes buenisimos de trazo libre del amigo Van Hamme y Griffo, me ha faltado siempre el tomo tercero.
Por eso la publicación de un integral seria lo suyo.
Saludos.
Pero todavía de verano? ;)
ResponderBorrarPues no de verano precisamente (aqui no existen esos lujos). Trabajando fuertemente, lo que me ha impedido concentrarme en las proximas entradas, pero ya las tengo planeadas.
ResponderBorrarla felicidad suele ir asosiada a la libertad en último término. Las normas deben ser muy sutiles, pero eficaces que no sepamos ni que están. Osea, que se acepten por su naturalidad.
ResponderBorrarPor fin me paso por aquí (y eso que me prestas todos los comic)
ResponderBorrarVe cuándo me prestas este que está muy interesante....
wow! cuántas cosas interesantes... gracias!
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